¿Qué es el ácido hialurónico?

El ácido hialurónico es una molécula presente de forma natural en nuestro organismo. Capta agua para hidratar nuestra piel.

El ácido hialurónico está indicado para el tratamiento de las arrugas finas y profundas del rostro: pliegues nasolabiales (alas de la nariz a los labios), pliegues de amargura (lados de la boca al mentón), mejillas, pómulos, mentón, ojeras, patas de gallo.

¿Cómo es la intervención?

Se inyecta un gel a base de ácido hialurónico debajo de la piel. Se mezcla con ácido hialurónico natural. El gel capta el agua y toma volumen.

Las sesiones de inyección duran entre 10 y 15 minutos. Resultado: la piel se rellena y las ojeras mejoran. Se asimila gradualmente con el tiempo. No contiene ningún derivado de origen animal y por lo tanto no se reconoce como cuerpo extraño.

Ventajas del ácido hialurónico

El ácido hialurónico tiene la enorme ventaja de no presentar riesgo de alergia. Por lo tanto, no hay que realizar ninguna prueba preliminar. El ácido hialurónico causa pocos efectos secundarios. Puede ocurrir una pequeña reacción inflamatoria con un pequeño enrojecimiento durante 2 días. Los resultados son visibles inmediatamente. Lo serán aún más a partir de los 10 días, el tiempo que el organismo asimila el ácido hialurónico. La intervención debe renovarse cada año. A menudo son necesarias dos sesiones separadas por un mes para optimizar y mantener el resultado.